TEXTO PUBLICADO EN EL LIBRO DE LAS FIESTAS 2010

viernes, 9 de abril de 2010

Orden Militar de Maestres de Calatrava

Hace ya un lustro que la Orden Militar de Maestres de Calatrava contribuye a adornar durante los primeros días de mayo las calles de Caravaca. Estos monjes, a las órdenes del Abad Raimundo de Fítero, colgaron sus hábitos allá por el año 1.158 para convertirse en valerosos maestres guerreros armados de ballestas de afiladas flechas y vestidos con oscuras capas de amplios capuchones, llamados por S.M. el Rey Sancho III en defensa de la Cristiandad, ante la invasión y conquista mora. Después de este breve pero intenso tiempo en el Bando, nos disponemos a disfrutar y vivir nuestro primer Año Santo, acontecimiento para el que sin duda, los Maestres de Calatrava pondremos todo lo que esté a nuestro alcance para el mayor ensalzamiento y vistosidad de la Fiesta.
Desde nuestra fundación, inspirada por valores de amistad, austeridad y un estilo propio de vivir la Fiesta, la Orden de Calatrava ha visto incrementado el número de sus maestres de manera importante año tras año, crecimiento que ha consolidado notablemente la Orden, convirtiéndola en un grupo característico del Bando Cristiano, cuando entre nuestras centenarias calles se divisan las capuchas de sus maestres al viento. Es indudable que a los valores primitivos de los Calatravos hay de sumarle la hospitalidad y fraternidad que hemos logrado aportar, aspectos que han conseguido que tanto desde dentro de la Ciudad Santa de Caravaca, como desde otros confines de la Cristiandad, se hayan unido a los Maestres de Calatrava otros guerreros que han hecho realidad que conformemos un vistoso y generoso Grupo, sobre todo compuesto por amigos. Es difícil de describir la enorme emoción y reiterada ilusión que supone, cada primavera, calarse el verduguillo, vestirse las capuchas y blandir nuestras ballestas, para volver a mezclarnos con la historia y salir a nuestras calles. El Año Jubilar, momento de especial significado para la ciudad de Caravaca, no debe quedarse sólo en ésto y debería ser vivido y disfrutado por todos aquellos que comparten, tanto en Caravaca como en todos los lugares imaginables, el mismo deseo de venerar nuestra Stma. Cruz así como de conjugar esta veneración con el disfrute de las Fiestas en su honor. Es por ello que desde la Orden de los Maestres de Calatrava deseamos invitar a todos a nuestra Ciudad y a nuestras Fiestas, fieles al común espíritu hospitalario, tanto de este pueblo caravaqueño, como de esta Orden. ¡No dejéis de vivir el Año Santo y las Fiestas de Mayo de cualquier manera y desde cualquier lugar!… ganad el Jubileo, mezclaros en las filas moras o cristianas, corred junto al aliento de los Caballos del Vino, o simplemente, compartid las calles y vibrad junto a nosotros al ritmo de nuestras marchas. No quisiéramos dejar pasar tan significativo Año y tan honrosa ocasión, para agradecer a D. Juan Manuel Cantó, D. Pedro Caparrós y las anteriores Juntas Directivas su generoso trabajo al frente de los Maestres de Calatrava para lograr los grandes momentos vividos estos años pasados. Con el deseo de que este Año Santo y los sucesivos consigan superar los anteriores, trabajamos fieles a nuestros valores, ilusionados, haciendo y renovando la fiesta, aportando nuestra especial idiosincrasia, dispuestos a encarar el 2010 junto a nuestra gente, junto a los que se nos van uniendo, junto a los que se sienten atraídos por este Grupo, su filosofía, su carácter, su indumentaria, significado y simbología…, por todos vosotros y por todos nosotros: ¡a quienes en buen hora xinçiesteis ballestas!

Antonio Guirao Sánchez

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